He estado buscando alternativas para no usar el concepto en inglés, pero convendréis conmigo en que “los 6 gorros de pensar” es poco glamouroso… El caso es que la teoría desarrollada por Edward de Bono es una de las herramientas más conocidas a la hora de plantear un proceso creativo o de resolución de problemas, y su puesta en práctica ayuda a obtener conclusiones que quizás no resulten evidentes a primera vista.

Y es que normalmente, a la hora de generar ideas, todos solemos comportarnos de forma bastante intuitiva y unidimensional. Transformar esta costumbre en un proceso sistematizado que además amplíe los posibles enfoques de una cuestión es lo que pretende esta técnica.



Los seis sombreros de colores representan seis modos diferentes de enfocar un problema. La idea es que, cuando entremos (tanto en procesos individuales como de grupo) en una de estas fases, nos centremos única y exclusivamente en abordar el problema desde esa perspectiva. Esta segmentación del pensamiento ayuda a que podamos extraer lo máximo de cada uno de los estilos de pensamiento y así eliminar las posibles interferencias que surgirían si saltamos de uno a otro sin orden ni concierto.

Los distintos sombreros son el blanco (que se refiere a la información pura y dura, a los datos), el rojo (que se refiere a opiniones, sentimientos, intuiciones… pensamiento emocional), el amarillo (en el que se busca resaltar los aspectos positivos, un enfoque completamente optimista), el negro (en el que, por contra, se busca resaltar los aspectos negativos desde el posicionamiento más pesimista posible), el verde (el más creativo, en el que se busca que surjan nuevos enfoques y nuevas ideas) y el azul (en el que se trata de dar dar una visión integradora de las ideas surgidas con los sombreros anteriores).

Sin duda se trata de una herramienta muy interesante para su uso a la hora de ordenar procesos creativos y de resolución de problemas, ya que permite por un lado ordenar y sistematizar el proceso y por otro asegurar que se cubren los aspectos más relevantes de la cuestión.

Gracias papi.

Fuente: http://www.elblogsalmon.com/autor/consultor-anonimo

Etiquetas: creatividad